lunes, 13 de septiembre de 2010

kafka y la muñeca viajera

2 comentarios:

Soteloo dijo...

Kafka y la Muñeca Viajera
Este libro relata lo últimos días del escritor Franz Kafka, autor de la metamorfosis. Descrito por Jordi Sierra I Fabra de una manera muy peculiar. Que se lleva a cabo en 1920 al termino de la primera guerra mundial.
La historia comienza en el viejo parque Steglitz, donde se encuentra el creador de barias aventuras, protagonista de la historia Franz Kafka, quien salió temprano a dar un paseo por ese parque lleno de vida, se envolvió en sus pensamientos observado las diferentes parejas que recién se unían, casados y otros que formarían una familia.
Entonces sucedió algo que le daría un giro a su vida, ante él se encontraba una pequeña niña de nombre Elsi que lloraba como si le habían quitado lo más preciado de su vida. Kafka se le acerca para consolarla y en efecto se le había perdido su muy preciada muñeca de nombre Brígida. El escritor se sentía indignado y sin saber que hacer le dijo, no está perdida, se fue de viaje. E invento que él era el cartero de muñecas.Alivio el dolor de la niña por un tiempo pero ahora él se encontraba en un aprieto, tenía que escribirle una autentica carta escrita por una muñeca para la pequeña e inocente Elsi.
Al día siguiente como se había acordado, se encontraba la niña esperando la carta de de su muñeca, Kafka ya la tenía preparada, y como Elsi no sabía leer, el se la leyó. La carta parecía autentica no le faltaba ningún detalle, y empezaba mencionando que Brígida la quería mucho, explicando porque se tenía que marchar y que la vida representa ir siempre hacia adelante, aprovechando las oportunidades. Y que todo lo que es se lo debe a ella, la niña que la cuido y quiso durante años, pero que tenía que emprender su nueva vida porque gracias a ella, Brígida era libre, y termino contándole que se encontraba en Londres y todo le que le había sucedido ahí.
Y así fue como inicio carta tras carta, día tras día con ayuda de su amada y compañera Dora, como el cartero de muñecas le escribió durante tres semanas a Elsi, despertando en ella tantas ilusiones. En estas cartas relataba las aventuras de Brígida por los distintos lugares de todo el mundo y siempre con un buen mensaje para Elsi, relatados con tanta viveza y detalle, durante aquellas tres semanas epistolares, la muñeca le enviaba su amor atra vez de las cartas a la niña día tras día, le contaba que sus viajes y aventuras en el extranjero la retenían lejos.
Entonces un día se dio cuenta que no podía seguir así, tenía que buscar un final. Y por otro lado Kafka se encontraba mal de salud.
Un día se encuentra con mama de la pequeña Elsi, ella había leído las cartas, y llega con una sorpresa contrario a lo que espera Kafka, le dice que sus cartas son Hermosas pero que no puede seguir así. Entonces el cartero de muñecas y ya amigo de su hija, le dice que ya estaba pensando en un final, e hizo énfasis en un Final Feliz.
Esa tarde se encontraba en su escritorio pensando en aquel final, mientras su compañera Dora platicaba de con él. De pronto aquella inspiradora sonrisa de Elsi le dio la fuerza para escribir y terminar aquel final.
Al día siguiente Kafka llego tarde a la reunión diaria por pasar antes a la tienda, cuando se encontró con Elsi, Kafka traía entre sus manos un paquete, ella la abrió como si fuera el regalo mas añorado y dentro de él se encontraba la más hermosa muñeca de la tienda.
Y entonces le entrego la última carta de Brígida. Se encontraba en Tanzania, y en fue ahí donde le sucedió lo más humano y lindo, se enamoro y tras ello llego el compromiso y matrimonio. Brígida se despedía de ella y le deseaba que fuera lo más feliz, le agradecía por todo lo que le había dado.
Kafka de vez en cuando intercambiaba saludos y sonrisas con la pequeña Elsi que hizo de sus últimos días una maravilla. Un año después muere el escritor.
Este libro me pareció entretenido y la vez su lectura es fácil. Te hace ver como la infancia es una etapa muy bella en la vida, llena de inocencia, imaginación. Los niños disfrutan de la vida sin preocupaciones. Y es diferente la historia.
FENANDO SOTELO, SALON: 32

Soteloo dijo...
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